LA RESPONSABILIDAD DEL BANCO CENTRAL
EUROPEO EN LA CREACIÓN DE DESEMPLEO
Artículo publicado por Vicenç Navarro en el diario digital EL PLURAL, 13 de mayo de 2013
Este artículo señala la gran responsabilidad que el Banco Central Europeo (y el Banco de España) tienen en la destrucción de empleo en los países de la Eurozona y muy en particular en España.
El contraste entre el comportamiento del Banco Central estadounidense (el Federal Reserve Board, FRB) en EEUU y el Banco Central Europeo (BCE) en la Eurozona es enorme. El Sr. Draghi y el BCE que preside, consideran que la labor más importante a realizar es la de garantizar una baja inflación y lo están consiguiendo. La inflación ha ido bajando y bajando en la Eurozona, alcanzando en el último trimestre el promedio del 1,7%, por debajo incluso de lo permitido en tal comunidad monetaria.
Pero las políticas públicas (tales como la política de recortes de gasto público y las reformas laborales orientadas a facilitar el despido y la reducción de los salarios) que el BCE está activa y agresivamente promoviendo en la Eurozona, con las cuales consigue esta baja inflación, están causando una enorme recesión (la Eurozona está prácticamente en recesión desde 2011) y una tasa de desempleo nunca antes vista desde la II Guerra Mundial (un 12% como promedio). En España esta cifra ha batido un récord. Es, después de Grecia, la tasa de desempleo más elevada. Esta situación está afectando muy negativamente al bienestar y calidad de vida de la población, no solo de la desempleada, sino también de la empleada, pues aumenta la inseguridad y el temor (algunos pueden llamarlo el terror) entre la población. La gran mayoría de la población tiene miedo a perder su puesto de trabajo, habiéndose creado una cultura de inseguridad y falta de protección social.
Las recientes y crecientes manifestaciones populares en contra de estas políticas, así como su clara ineficacia para salir de la crisis, están forzando a que se reconozca cada vez más lo que ahora se llama “la insuficiencia de las políticas de austeridad”. E incluso el Sr. Draghi ha indicado recientemente que es necesario desarrollar “políticas de estímulo económico”, reanimando a la demanda doméstica para que pueda estimular la economía. Que este señor reconozca esta obviedad es semejante a que el Papa reconociera que el uso de preservativos es bueno para prevenir el SIDA (cosa que, por cierto, el Vaticano nunca ha admitido).